miércoles, 28 de septiembre de 2011

Poderes psíquicos

En una ocasión, un hombre con fama de grandes poderes psíquicos se acercó al Buda y le dijo:
 - Señor, durante muchos años he hecho penitencias imcomparables. Me he mortificado implacablemente.   Por fin he conseguido caminar por las aguas. 
A lo que el Buda replicó:
 - Amigo mío, ¡qué lástima de tiempo perdido habiendo barcas!


Buda, El Príncipe de la Luz
Ramiro Calle